lunes, 19 de diciembre de 2011

Inauguración del centro misional “Santa Teresita” y bendición de capilla del Beato Ceferino Namuncurá, en el barrio de Los Tilos, de La Lonja, en Pilar.

Este sábado 17 de diciembre, a las 18, el Obispo de Zárate-Campana Mons. Oscar Sarlinga bendijo una nueva iglesia e inauguró un nuevo centro misional, en la jurisdicción de la parroquia de San Manuel Mártir, en La Lonja, partido de Pilar. Se trata de la capilla del Beato Ceferino Namuncurá (la primera con ese título en la diócesis), obra que se realizó junto al ahora creado “centro misional” de Santa Teresita del Niño Jesús, en el barrio “Los Tilos”, lugar que forma la última parte de la diócesis de Zárate-Campana, ubicada entre la avenida que une la antigua ruta 8 con la autopista ramal Pilar y el arroyo Pinazo, que es el límite con la diócesis de San Miguel. Alrededor del nuevo centro misional, buena parte de las familias es de origen paraguayo, nacidos, hijos o nietos, o de provincias de nuestro país y la zona tuvo cuatro misiones parroquiales juveniles consecutivas. La historia misional de la región data de los años 1980 y 1981 cuando se realizó misión parroquial desde la iglesia matriz de Nuestra Señora del Pilar, al término de la cual se celebró la primera misa en el barrio, en un terreno “baldío”, sin edificación alguna, y también se realizaron bautismos, primeras comuniones y matrimonios. La catequesis comenzó a darse en el predio de la entonces “sociedad de fomento”. Con el decurso del tiempo, en un terreno  prestado  por vecinos se armó una casilla de madera y chapas y se colocó allí una pequeña imagen de Santa Teresita del Niño Jesús, que aun existe, y que sobrevivió tanto al incendio que destruyó el primer recinto como al tornado que hizo volar al segundo. A partir de allí las escasas misas que se celebraban en el año lo eran en casas de familia, hasta que se adquirió el terreno actual y se comenzó con una pequeña construcción. En el año 2006 nuestro Obispo Mons. Oscar Sarlinga nombró al P. Albino Cabral como vicario parroquial de Ntra. Sra. del Pilar, con especial encargo para la atención de la zona de “La Lonja” y para ayuda de la llamada «vicaría» de Ntra. Sra. de Caacupé. Como vicario parroquial de Nuestra Señora del Pilar y encargado de la pastoral en La Lonja, el P. Albino Cabral comenzó a interesarse por el lugar de culto en Los Tilos apenas llegado, y en el año 2007 tomó las disposiciones para vallar el terreno y procuró comenzar con algunas mejoras en el lugar existente, que seguía siendo precario, así como a buscar catequistas para el lugar, puesto que habían quedado sólo 2 para tal misión, siendo que el barrio se había poblado más y el número de niños habían crecido mucho. Mientras tanto, visto el crecimiento de la zona, la mejor atención pastoral y la buena respuesta de la comunidad católica en la zona llamada “La Lonja”, donde se pudo hacer casa parroquial, salones pastorales, de catequesis y de Caritas, y otras instalaciones pastorales el Obispo Oscar Sarlinga procedió al erigimiento de “San Manuel Mártir” de La Lonja como “parroquia” el 30 de noviembre de 2008, desmembrándola así de la parroquia de Nuestra Señora del Pilar, dándole plena autonomía, y nombrando al Pbro. Albino Cabral como primer cura párroco. En los finales del año 2010, movido por la Divina Providencia, un fiel católico que ha recibido una gracia por intercesión del Beato Ceferino, el Sr. Norberto Krummel ofreció al P. Albino construir un templo en honor del beato Ceferino Namuncurá en una zona tan necesitada. Es así que en el año 2011 comenzó a construirse la actual capilla (visitada por Mons. Sarlinga en sus inicios, con ocasión de una visita pastoral a La Lonja). El nuevo templo pudo ser concluido en 7 meses, incluso con donaciones especiales de diezmos, con la cuales pudo proveerse a construirse salones para la catequesis y distintos talleres de promoción social, para enseñanza de oficios. Como “centro misional” el lugar sigue estando bajo el patronazgo de Santa Teresita del Niño Jesús.

Mons. Oscar Sarlinga donó para el nuevo templo una artística cruz, un atril y una reliquia insigne del Beato Ceferino.A esta altura del año 2011, ya cercanos a la Navidad, puede decirse que la comunidad creció maravillosamente, e incluso del barrio de la nueva capilla del Beato Ceferino están surgiendo vocaciones sacerdotales.

La misa tuvo lugar a las 18, y junto con Mons. Sarlinga concelebraron Mons. Edgardo Galuppo, el cura párroco, Pbro. Albino Cabral, Mons. Daniel Ferrari, el Pbro. Gabriel Micheli, cura de Nuestra Señora de la Paz y San Francisco de Asís, de Pilar, el Pbro. Gustavo Páez y el Pbro. Mauricio Aracena. El obispo en su homilía hizo referencia a la fe que mueve a vivir en el amor, explicando el “credere in Deum” de San Agustín: “estas zonas barriales tienen muchas potencialidades, nuestra gente requiere que se despierte ese Amor a Cristo en sus corazones, y que ese cristianismo, ese catolicismo se haga vida concreta, expresión de la fe, ese “credere in Deum” del que hablaba San Agustín”, dijo. Exhortó a afinar la adhesión del corazón al contenido de la fe, la misma Revelación que la Iglesia nos propone para creer, y que en última instancia es el mismo Cristo, plenitud Él mismo de la revelación. Luego de mencionar el Año de la Fe, anunciado por el Papa Benedicto XVI para octubre de 2012, exhortó a una verdadera “nueva evangelización” como lo pide la Iglesia, a proseguir la misión y la solidaridad. Para concluir relató los trazos principales de la vida del Beato Ceferino Namuncurá y de Santa Teresita del Niño Jesús, y exhortó a todos a encontrar “nuestro lugar en la Iglesia”, haciendo hincapié en que uno fue llamado a ser “evangelizador” desde el Cielo, puesto que Dios lo llamó junto a sí muy joven, y la Santa de Lisieux entregó su vida por las misiones y por las vocaciones sacerdotales.

Al término de la ceremonia, el párroco y el donante descrubrieron la placa conmemorativa, y se tuvo un ágape fraterno del que participaron todos los grupos apostólicos presentes y la gente del barrio, permaneciendo hasta el final tanto el obispo como los sacerdotes. 

Homilía de Mons. Oscar D. Sarlinga
En la inauguración del Centro Misional de Santa Teresita del Niño Jesús
Y dedicación del templo del Beato Ceferino Namuncurá
En el barrio de “Los Tilos”, en los límites de la localidad de La Lonja, parroquia de San Manuel Mártir (partido de Pilar)
17 de diciembre de 2011

Queridos sacerdotes, diáconos, seminaristas, religiosas, hermanos y hermanas:
Estamos aquí hoy, en este cuarto domingo de Adviento, tiempo de gozosa espera y de penitencia en la esperanza, para inaugurar el centro misional de “Santa Teresita del Niño Jesús” y capilla del Beato Ceferino Namuncurá, “el príncipe de las Pampas” como ha dado en llamársele. Nos mueve la perspectiva de la misión evangélica con fe y en la esperanza del Reino, del cual todos somos heraldos y testigos; la presencia del Obispo y de los sacerdotes, y de todos ustedes, en esta nueva iglesia, manifiesta la misión de anunciar el Evangelio de la gracia y la verdad (Cf Jn. 1, 14), llevar el mensaje de salvación al mundo, anunciar la necesidad de la penitencia y de la redención, invitar a todos a la esperanza, y, con la gracia de Cristo, exhortarnos unos a otros a no sucumbir a los “ídolos” siempre renacientes; convertirnos, en fin, a Cristo Salvador, cuya Buena Noticia de salvación (Cf Mc. 1) estamos llamados a transmitir con plenitud de ánimo, de fortaleza que viene de Dios (Cf Hech 6, 8), a los hombres y mujeres de nuestro tiempo, también aquí, en este popular y creciente barrio de “Los Tilos”, a la vera del arroyo Pinazo, inserto en una realidad social concreta, humilde, sí, y llena de la dignidad propia de quienes la habitan porque son hijos de Dios y quieren un legítimo desarrollo integral. Estas zonas barriales tienen muchas potencialidades, nuestra gente requiere que se despierte ese Amor a Cristo en sus corazones, y que ese cristianismo, ese catolicismo se haga vida concreta, expresión de la fe, ese “credere in Deum” del que hablaba San Agustín.
Como Pastor de ustedes, como Obispo, les pido que pongamos la disposición de nuestro espíritu para una dedicación total al amor de Cristo (Cf Mt 12,29) el cual manifiesta con su Luz (que veremos litúrgicamente naciente en Navidad) la exigencia misionera esencial propia de todo bautizado, y en especial (aunque no exclusivamente) propia de los sacerdotes, que han sido consagrados en una disponibilidad total por el Reino de Dios. Les pido que dispongamos nuestro corazón a perdonar, y a ser perdonados, y en especial en este tiempo de Adviento, de preparación a la Navidad, de acercarnos al sacramento de la reconciliación, que nos sana y nos libera del pecado, y de tal modo nos dispone a liberarnos también de las consecuencias del pecado, en el orden personal y social.
Hablábamos de vida cristiana y de consecuencias de nuestra fe, el “credere in Deum”. Nuestro Papa Benedicto XVI ha anunciado en su carta apostólica “Porta fidei” que proclamará el año 2012, como “Año de la Fe”. Lo ha hecho siguiendo el camino de Pablo VI (quien proclamó “Año de la Fe” al 1967, y nos legó el “Credo del Pueblo de Dios, en 1968) y de Juan Pablo II, quien trazó los surcos de la nueva evangelización, en los países católicos en los cuales tantos se han alejado de la Iglesia, de la fe, del Amor de Cristo, y también en aquellos lugares donde es necesaria una “misión ad gentes”.  Este próximo “Año de la Fe” tendrá lugar a partir del 11 de octubre del 2012, en el 50º aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II, hasta el 24 de noviembre del 2013, en la solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo. Tengámoslo presente para asumir todo el sentido de la fe, como “adhesión de toda nuestra inteligencia y nuestro corazón” pero adhesión a un “tesoro”, el contenido de la fe que la Iglesia nos propone para creer, y que nos ha revelado Jesucristo, plenitud Él mismo de la Revelación. Esto significará también para nosotros un desafío. Sí, es para nosotros un desafío a asumir, cada uno según su vocación y elección, como dice San Pablo, cada uno según su llamado y sus reales posibilidades, sus talentos, sus dones y su puesta a disposición a la llamada divina.
El patronazgo de Santa Teresita del Niño Jesús, co-patrona de las Misiones, nos dice mucho, y además este lugar de culto, que ahora se ha podido finalizar, tiene mucho que narrar acerca de la protección de esta santa sobre estos lares, sobre esta gente nuestra que aquí vive, que aquí, como familias, y como familia de Dios (que es la Iglesia) dan testimonio de ser cristianos.
El Beato Ceferino Namuncurá beatificado el último domingo de noviembre de 2007 por el Sr. Cardenal Tarcisio Bertone, en nombre del Papa, en Chimpay, localidad de la Patagonia argentina, era hijo del cacique araucano Manuel Namuncurá, llamado por su mismo pueblo el "Rey de las Pampas". Él también nos toma bajo su protección, porque lo que quería era que su padre lo llevara a Buenos Aires para estudiar y así «ser útil más tarde a su pueblo». Ceferino no se encontró a gusto en un centro de estudios estatal y fue  su padre mismo quien lo hizo pasar al colegio salesiano "Pío IX", existente hasta hoy, gracias a la intervención de Mons. Cagliero, evangelizador también de la Patagonia y luego Cardenal. La gracia transformó su corazón, cada vez más. Quería ser sacerdote, era el secreto de su corazón. Lo expresó ya siendo aspirante salesiano, ¡quería ser sacerdote! Y su vida misma era como un manifiesto mismo del Evangelio, al punto que fue recibido en audiencia por el Papa San Pío X, quien lo miró con sus ojos llenos de dulzura (que lo caracterizaban), lo escuchó con cariño, con interés por su camino de fe y con esperanza, y como corolario le regaló al final la medalla «ad principes», reservada a los príncipes, ratificándolo así como “el príncipe de las Pampas”. El Señor tenía para Ceferino planes mayores, y lo llevó consigo antes de ser sacerdote en esta tierra, para que fuera intercesor, para que muy junto a Él, al Corazón de Jesús y a la Virgen, nos acompañara desde el Cielo, y que con sus ojos también llenos de ternura y compasión nos mirara y nos diera su amistad desde muy junto a Dios. Contamos hoy aquí con una reliquia insigne suya, para que en este templo permanezca y sea como un signo visible de su presencia.
Siempre he pensado que es propio de bien nacido el ser agradecido. Gracias a todos, por ello, gracias a quienes han hecho posible que con la Gracia de Dios se forme esta comunidad católica, gracias a quienes han hecho una realidad concreta este ansiado templo, estos salones pastorales, estas instalaciones. Los lugares de culto precedentes, ustedes lo saben, pasaron por muchas vicisitudes, incluso la destrucción debida primero a un incendio, y luego a un tornado, con materiales lábiles como estaba hecho. Sabemos también que en los dos casos quedó intacta la imagen de Santa Teresita del Niño Jesús, cuando alrededor todo fue destruido: algún mensaje ha querido darnos en cuanto a la asunción de la misión, de la misionariedad, de la dimensión misionera de la pastoral. Gracias a todos y a cada uno, catequistas, colaboradores, colaboradoras, a quienes entregaron “la ofrenda de la viuda” del Evangelio, y a quien cumplió un voto hecho a Ceferino, el Sr. Krummel, aquí presente. Gracias también al pastor de esta comunidad parroquial de San Manuel Mártir, de La Lonja, el Padre Albino Cabral, y a todos quienes entregan mucho de su vida por la evangelización, a tantos jóvenes, muchos hoy aquí presentes, y a todos aquellos a quien Jesús, “cuyos ojos son mil veces más brillantes que el Sol”, bien ve cuánto han puesto de sí, de la oración y del trabajo apostólico. Damos gracias a Dios por cómo creció la parroquia como “comunidad de comunidades”, como la llamara el documento de Puebla, en especial en Liturgia, la catequesis, la Caritas, la pastoral vocacional y los distintos grupos apostólicos. Gracias también a los seminaristas, que han hecho más feliz, evangélico y luminoso el año pastoral; yo sé que han dado un buen ejemplo y que han asumido su misión con espíritu de fe, con dedicación y alegría, y que les han hecho mucho bien a tantos y tantos fieles que entraron en contacto con ustedes.
Hoy ponemos en las manos de la Virgen María, Madre de Dios y Madre de la Iglesia, Madre de Ternura, llamada la Estrella de la Evangelización, de Santa Teresita del Niño Jesús y del Beato Ceferino Namuncurá, este centro misional y esta capilla, que es una iglesia dedicada a Dios, para el Pueblo de Dios.
Ponemos en el corazón de Cristo a nuestro pueblo, a las familias, para que tengamos paz, pan, trabajo, armonía, protección del Cielo, y para que crezcan y se acrecienten las vocaciones a la vida cristiana, la vocación a la santidad del matrimonio y en especial las vocaciones sacerdotales y religiosas, que ya han empezado a surgir, en este lugar de bendición. La bendición del Señor está descendiendo sobre nosotros, que sea como un renovado Pentecostés, en esta Eucaristía y siempre, unidos en el Amor. Recemos siempre los unos por los otros y no dejemos de invocar siempre al Espíritu Santo, el de Consuelo, el “Paraklétos”, nuestro Defensor, el que nos colma con sus dones y nos atrae suavemente a vivir la filiación divina.

sábado, 10 de diciembre de 2011

PEREGRINACIÓN NÁUTICA Y CELEBRACIÓN EN EL CENTRO “NUESTRA SEÑORA DE LAS ISLAS” DEL DELTA CAMPANENSE

El 8 de diciembre se ha desarrollado nuevamente la peregrinación náutica desde el puerto de la ciudad de Campana hasta la Escuela de Islas de nuestro Obispado, Centro Profesional 403 “Nuestra Señora de las Islas”. Por la mañana, como desde hace 9 años, se realizó la citada peregrinación náutica, a la que asistieron Mons. Edgardo Galuppo y el Pbro. Lucas Martínez, vicario parroquial de la iglesia catedral y capellán de la Prefectura, junto con 350 personas que navegaron el Paraná de las Palmas hasta el mencionado Centro, propiedad de nuestro Obispado de Zárate-Campana y a su cargo profesional y pastoral, donde se celebró la misa y los sacramentos de bautismo, comunión y confirmación.
 La salida de las lanchas de pasajeros desde el puerto campanense tuvo lugar a las 9 de la mañana. Además de las embarcaciones de particulares que siempre se suman a la festividad, para este año, se contó  también con la participación de un grupo de remeros que acompañaron el festivo y piadoso recorrido. Fue la 9º Peregrinación Náutica hasta Río Carabelas y Canal Alem “Nuestra Señora de las Islas”, de la que participan distintas instituciones.
Durante el viaje de ida se rezó el Santo Rosario y se entonaron cantos en honor a la Purísima Madre de Dios, cuya imagen bellamente adornada con flores era llevada sobre una de las lanchas de pasajeros.

Al llegar al establecimiento los peregrinos se acercaron a la ermita de la virgen que se encuentra en el predio (en realidad es una ermita incrustada dentro de un árbol y recubierta de cristal) y posteriormente todos se dirigieron al nuevo galpón (de creación reciente, para el servicio profesional que se presta, pero que por primera vez fue “inaugurado” con una celebración eucarística) para celebrar allí la Santa Misa que fue presidida por el Vicario general de la diócesis, Mons. Edgardo Galuppo.

Finalizada la Misa, la sombra de los árboles fue un buen cobijo para compartir el almuerzo con los peregrinos de la ciudad y los isleños que se acercaron a rendir culto a la Madre de Dios, llegando a reunirse unas 400 personas, contando los peregrinos y los lugareños.

Al caer la tarde las lanchas con los peregrinos volvieron custodiados por los agentes de la Prefectura Naval Argentina que acompañaron en todo tiempo.
Agradecemos a todos el trabajo realizado para poder vivir tan hermosa jornada para honrar a nuestra Madre en la solemnidad de la Inmaculada Concepción.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Murió el P. Rafael Carli

artículo tomado de : AICA
 
Murió el P. Rafael Carli, antiguo rector de la Basílica de Luján
Campana (Buenos Aires), 25 Nov. 11 (AICA)

El padre Rafael Carli.
La secretaría de Comunicación Institucional del obispado de Zárate-Campana hizo público el siguiente comunicado en el que, con el título “El Padre Rafael Carli CM ha entrado en la Pascua Eterna”, informa del fallecimiento de quien fuera por años rector de la basílica-santuario nacional de Nuestra Señora de Luján. Pertenecía a la Congregación de los Padres Vicentinos (Congregación de la Misión).

“A las 22 del día de hoy, jueves 24, nos ha avisado el padre Juan Carlos Gatti, visitador provincial, del fallecimiento del querido padre Rafael Carli, acontecido en horas de la tarde. Las autoridades de la Congregación han dispuesto que sea velado en la capilla de la Medalla Milagrosa, en Escobar, desde las 8 de la mañana hasta las 11, hora en que será celebrada la santa misa en su sufragio, puesto que es la intención llevar a continuación sus restos mortales (cerca de las 15) a un paso por la Basílica de Luján (donde fue Rector y párroco), para luego ser inhumado en el Panteón de la Congregación de la Misión.

“El padre Carli se desempeñó como rector de la Basílica de Luján cuando la visita de Juan Pablo II en 1982. Recientemente había recibido la distinción pontificia "Pro Ecclesia et Pontifice", de manos del obispo diocesano, monseñor Oscar Sarlinga.

“Es conocido por todos el talante sacerdotal del padre Rafael Carli, su profundo amor a la Virgen, su dedicación a los fieles, en fin, una vida entera dedicada a la Iglesia y a la Misión, con un sentido de fe que se hacía transparente a todos.

“Nuestro Obispo le profesaba un especial cariño y con motivo de su visita inmediatamente antes de su operación en el Hospital Austral, algunos meses atrás, pudieron dialogar con gran confianza y monseñor Sarlinga dijo sólo que, con un gran espíritu de fe en la Iglesia, el padre Carli hizo una revisión de su vida entera, y le dejó verbalmente como un "testamento espiritual".

“Luego de su operación fuimos informados de la gravedad e irreversibilidad de su dolencia. También monseñor Edgardo Galuppo, que concurrió a confirmar el 28 de octubre a la Medalla Milagrosa, volvió edificado de la virtud de la fortaleza del padre Carli, de su prestancia de hombre de Dios, de su devoción mariana.

“Cabe destacar cuánto se ha dedidado el padre Rafael al clero, tanto de su congregación como también del clero secular, y a esto se agrega su dedicación pastoral en las parroquias en las que colaboró o pastoreó, como la de Ingeniero Maschwitz, en cuyos últimos tiempos había sido nombrado Superior de la comunidad religiosa de Belén de Escobar. Numerosos fueron los sacerdotes que se acercaron a verlo en este último tiempo, y también muy numerosos los fieles laicos, que lo querían y veían en él un ejemplo.

“La gran preparación que estaba realizando el padre Carli ha sido la festividad de la Medalla Milagrosa, este 27, en Escobar, adonde concurrirá monseñor Oscar Sarlinga, quien también tenía la ilusión, que expresó varias veces en estos últimos días, de celebrar con un sacerdote tan ejemplar esa fiesta en honor de nuestra Madre, con un sacerdote que tan ejemplarmente venía preparándose para la Pascua Eterna.

“Un alma piadosa mencionó que quizá la Virgen ha querido que el padre Rafael la viera mucho más de cerca ese día 27 celebrando las Bodas del Cordero.

“Descansa en Paz, abnegado y dedicado Pastor de la Iglesia. Que el Señor te dé el ciento por uno: entra al Gozo de tu Señor.+

sábado, 12 de noviembre de 2011

Peregrinación del Pueblo de Dios a Luján

Con espíritu de fe, y alegría comunitaria se realizó la peregrinación a Luján. Autoridades viales de San Nicolás estimaron en 40.000 los peregrinos. En medio de un importante operativo para garantizar la seguridad de todos los peregrinos, miles de vecinos de Campana , Zárate y demás ciudades que coinciden con la circunscripción de la diócesis marcharon el sábado a partir de las 16, en esta 33º Peregrinación a Pie a Luján. Mons. Oscar Sarlinga se dirigió a Zárate, donde, el sábado a las 16 desde la plaza central, dirigió unas palabras a los peregrinantes allí congregados, y les dio su bendición. A las 18 el grupo concentrado en la plaza E. Costa de Campana fue despedido por Mons. Edgardo Galuppo, vicario general.
Esta madrugada, al cierre de esta edición, ya habían comenzado a llegar los primeros grupos de fieles, mientras se esperaba el grueso de la llegada de los grupos para después de las 5.30.
Desde las 6.00 estaba prevista la realización de la misa central a cargo de Monseñor Oscar Sarlinga.
A partir de las 02.30 del domingo 6 comenzaron a llegar los fieles peregrinos a Luján, donde fueron recibidos por los sacerdotes de la Basílica. El Obispo Mons. Sarlinga y numerosos sacerdotes estuvieron presentes desde las 03 de la madrugada de ese domingo para atender a los fieles en el sacramento de la reconciliación, es decir, para quienes se acercaron a confesarse, los cuales fueron en gran número, procedentes de las distintas ciudades. La Misa central fue presidida por Mons. Oscar Sarlinga y concelebrada por 20 sacerdotes de la diócesis, en tanto que numerosos otros permanecieron en los confesionarios para administrar la reconciliación.
Las instituciones intervinientes en la peregrinación, con la coordinación de la dirección de culto de la Provincia de Buenos Aires, fueron el ministerio de seguridad de la provincia de Buenos Aires, a través del Centro de Operaciones Policiales (COP) y las jefaturas departamentales y distritales de Zarate, Campana, Exaltación de la Cruz, Pilar, Mercedes-Luján, también el ministerio de salud de la provicia, la agencia vial de transporte de la provincia que por la resolución 49/2011  otorgaron el corte y restricción al tránsito de la ruta 6 y de todo el recorrido de la Peregrinación, la dirección  Políticas de Seguridad Vial, la ayuda de cruz roja, bomberos voluntarios y muy especialmente el municipio de Campana y Zárate, así como también Pilar y Exaltación de la Cruz.

martes, 18 de octubre de 2011

Culminó la Misión Joven en Pilar

Como uno de los ejes fundamentales de la pastoral diocesana, luego de las Misiones en Baradero (2007), en Escobar (2008), en Campana (octubre de 2009) . en San Antonio de Areco (mayo de 2010) la comunidad de Nuestra Señora del Pilar recibió la Misión Joven 2011 con el lema:  "Con María vamos hacia el Padre",  siendo el ejido urbano perteneciente a la jurisdicción parroquial el lugar donde misionaron los jóvenes provenientes de las ciudades y partidos de la diócesis de Zárate-Campana, acompañados por familias y laicos comprometidos de la parroquia del Pilar y de otras parroquias del partido homónimo. Los seminaristas del Seminario "San Pedro y San Pablo" participaron de la misión, como lo hicieron en las anteriores. El Pbro. Jorge Ritacco, cura párroco, había solicitado al Obispo y al consejo presbiteral tener su parroquia de Nuestra Señora del Pilar como sede de la misión ya desde el año 2009.
La Misión Joven es organizada por la pastoral de Juventud (a cargo del P. Hugo Lovatto con el secretariado diocesano) y con apoyo de la delegación de misiones, la puesta a disposición de la parroquia que pide la misión y toma a cargo su organización, y el acompañamiento continuo del Obispo y de los organismos pastorales diocesanos. Este año fueron 527 los jóvenes participantes, entre los cerca de 500 inscriptos en la delegación de Juventud y los restantes "servidores" pertenecientes a la parroquia. 
Durante la misión se tuvo visitas a las familias del lugar, evangelización y misión realizadas por los jóvenes, y algunos actos especiales, de carácter litúrgico, y animación misionera, así como estuvieron a disposición durante los días de misión los sacerdotes diocesanos que, numerosos (más de 20) acudieron para administrar el sacramento de la reconciliación. Las parroquias del partido de Pilar prestaron una colaboración activa.
En la misa de clausura, el domingo 16 de octubre, a las 11, concelebrada por 15 sacerdotes, con la asistencia de todos los seminaristas, fue presidida por Mons. Oscar Sarlinga y concelebrada por el cura párroco, Pbro. Jorge Ritacco, el vicario, Mons. Edgardo Galuppo, el Rector del Seminario, Mons. Santiago Herrera, el decano de Pilar, Pbro. Oscar Iglesia y otros sacerdotes del decanato y del resto de la diócesis. El Obispo hizo referencia al sentido de la misión, a la necesidad de ser "concordantes" (en el sentido de aportar concordia y unión de los corazones) y "esperanzados", antes que "discordantes" y "quejosos", porque con estas dos actitudes últimas, la Iglesia no hace misión. Agradeció a todos, autoridades presentes, a los laicos, especialmente a quienes tuvieron a cargo la logística de la misión (de la parroquia de Ntra. SRa. del Pilar), al colegio "Nuestra Señora del Pilar" que prestó toda su colaboración, y en especial a los jóvenes misioneros, quienes multitudinariamente participaron de la misa, junto con otros jóvenes y familias de la zona.
A continuación ofrecemos algunos aspectos del Plan pastoral que se refieren a la Misión Joven.
La «Misión Joven» diocesana, se encuentra en el contexto de nuestra opción por la comunión y la misionariedad, que han quedado plasmados en nuestro «Plan Pastoral diocesano», el cual, en la INTRODUCCIÓN, I: «ORIENTACIÓN FUNDAMENTAL del PLAN» nos habla en primer lugar de la dimensión «discipular» a la que nos llama el Documento de Aparecida, a saber:
“En este sentido, dicho Documento de Aparecida nos lleva a ver en dicha pastoral orgánica una dimensión discipular: "Una dimensión constitutiva del acontecimiento cristiano es la pertenencia a una comunidad concreta, en la que podamos vivir una experiencia permanente de discipulado y comunión con los sucesores de los Apóstoles y con el Papa”.
La «conversión a Jesucristo» es fundamental para redescubrir el sentido de la misión; por esta causa sigue diciéndonos nuestro «Plan»:
“A los fines de asegurar la vitalidad de esta pastoral ordinaria y orgánica sobre todo hemos de retomar con energía el proceso de la reforma y conversión de nuestras parroquias, procurando su renovación en profundidad y en ámbito evangelizador, aprovechando la totalidad de sus potencialidades pastorales para llegar efectivamente a cuantos le están encomendados, asumiendo de modo decidido y convencido un «estado permanente de misión», en primer lugar dentro de su propio territorio”.
Por supuesto, tenemos una historia, y la vocación por la dimensión misionera de toda la pastoral hemos venido trabajándola en las distintas instancias de nuestra Iglesia local desde hace más de tres años. En nuestro «Plan Pastoral» (en el capítulo I: «EL CAMINO PASTORAL RECORRIDO NOS ORIENTA, Y NOS ALLANA EL CAMINO POR RECORRER»), en el n. 2, se nos brindan «Orientaciones programáticas efectivamente realizadas y re-asumidas en este Plan Pastoral», entre las cuales las siguientes:

-La Misión como una necesidad permanente y una actitud necesaria para la evangelización de nuestra diócesis.
-El impulso de la Pastoral de Juventud y Pastoral Vocacional
-El apoyo a los Movimientos eclesiales en la diócesis y a su integración en la Pastoral orgánica.

Asimismo, en el capítulo I, n. 7, cuando se habla de la profundización en la dimensión evangelizadora de toda la Pastoral, se nos recuerda a todos que “(…) el Proyecto pastoral debe profundizarse aún más al considerar el aspecto evangelizador, el objetivo de lograr una DIÓCESIS MISIONERA. También en ese sentido, el «camino recorrido», o la misma realidad eclesial vivida, tiene mucho para proponernos.

Ya se había reflexionado sobre la necesidad de la misión entendida en primer lugar hacia dentro de la misma comunidad diocesana. Ése es el sentido del llamado "estado de misión".

En el Mensaje que nos dirigió nuestro Obispo con motivo de la apertura del «Año Paulino Jubilar» nos decía nuestro Pastor:

"Este tiempo de gracia es ocasión propicia también para que reflexionemos en la relación esencial entre justicia y caridad, virtudes inseparables, tema al cual el Papa le ha dedicado una especial consideración en la segunda parte de su Encíclica «Deus Caritas est». No existe caridad sin justicia. Al mismo tiempo, el cristiano está llamado a buscar siempre la justicia, llevando dentro de sí el impulso superador que proviene del Amor, que supone la justicia y la trasciende. Reaprender a ser justos, a compartir, a crear condiciones de justicia y paz, implica abrir el corazón a Dios y a los hermanos. Que sea éste un tiempo en que podamos ver cómo la fe abre puertas extraordinarias al trabajo por un orden justo en la sociedad, a una «caridad social» rectamente entendida y aplicada, y en particular en lo referente a los fieles laicos, en la participación personal en la vida pública, cooperando con los demás ciudadanos"
(Carta pastoral del Obispo con motivo del Año Paulino")

Ahora entonces, fijémonos en la referencia concreta que hace el «Plan Pastoral diocesano» a las misiones juveniles (capítulo I, n. 7):

“La propuesta y puesta en práctica de las «misiones juveniles» llevadas a cabo en distintas ciudades y localidades de la diócesis por parte de grupos de jóvenes misioneros ha tenido una importancia clave en el conocimiento mutuo, en el amor por el sentido de la misión, y en la revitalización de comunidades católicas que hasta ahora habían sido visitadas más bien por otros grupos religiosos o incluso por sectas”.

Conjugando la Pastoral Litúrgica, con la de Juventud, con la Pastoral misionera, la vocacional y la caritativa institucional, fueron planificadas las misiones juveniles en el mismo lugar, ciudad o partido donde iban a ser celebradas las Fiestas Patronales diocesanas (en torno al 8 de mayo), día en que se viene llevando a cabo una entera «Jornada Pastoral», compuesta principalmente por la dimensión catequística, juvenil y caritativa”.

Todo un programa de vida y de vida misionera. Pongamos aquí nuestro corazón, para que tantos hermanos se encuentren con la Palabra de Jesucristo, con la Eucaristía, que se reconcilien con el Señor y con la Iglesia, que es el Cuerpo de Cristo y Pueblo de Dios, que se reconcilien con el Amor con el que Dios nos amó, y dén de ese Amor a los demás, para construir una sociedad nueva.

Es un desafío para los jóvenes, especialmente, que todo lo que demos de nosotros, lo demos con todo el corazón, recordando a SAN AGUSTÍN, Obispo y Doctor de la Iglesia:
“Quien da todo, da mucho, aunque sea poco, 
quien no da todo, da poco, aunque sea mucho”.

Con respecto a la MISIÓN y a la MISIONARIEDAD, nuestro Obispo ha hecho incesantes referencias, y gestos concretos, desde su inicio del ministerio en diócesis.

Hemos recogido algunos textos, tanto del propio Obispo como de medios periodísticos, cuya lectura nos ayudará a rehacer el itinerario de los gestos concretos de misión, desde 2006 en adelante, y la profundización de la dimensión misionera de toda la pastoral.
I. Referencia de Mons. Oscar Sarlina al rol fe la Iglesia en la construcción de un «mundo nuevo» con la «perenne novedad del cristianismo» en la celebración de las Fiestas Patronales de la Exaltación de la Cruz

Capilla del Señor, 14 de septiembre de 2009, (Diócesis de Zárate-Campana)

Consultar:

“La caridad es amor recibido y ofrecido”1, frase que, en cierto sentido, resume el Misterio de la Cruz en nuestras vidas, puesto que el sufrimiento reproducido en el Cuerpo místico de la Iglesia por la muerte de Cristo, es contribución a la redención de la humanidad, en la caridad, y aseguran la participación en la gloria del Resucitado, el mismo Jesucristo. De ese modo, desde el interior de nuestra vida, el mundo es consagrado a Dios en el Amor2.
Esto nos deja un gran mensaje. ¡Y un gran mensaje de esperanza!. La caridad verdadera, efectiva, transformadora, la caridad como virtud teologal realizada y vivida hace que nuestra relación con el mundo de hoy no sea mundanidad o puro naturalismo, sino expresión del Amor y de la misión de Cristo. Esta caridad realizada y vivida es raíz de esperanza, tan necesaria, esperanza que siempre resurge, incluso cuando los frutos exteriores de nuestro esfuerzo y de nuestro trabajo se vean escasos, o falten del todo. Nuestra vida cristiana, más que por las obras externas, aunque éstas son importantes, y muy importantes, se hace fecunda sobre todo por el Amor de Cristo, que nos impulsa a la donación total de nosotros mismos, en las condiciones de la vida común de cada día.
¿Podríamos dejar de ver que esta donación por Amor se hace tanto más necesaria en nuestro tiempo?. Porque son tiempos en los que la humanidad se encuentra en un momento crucial de su propia historia. Más que un «mundo nuevo» (porque ya hace siglos que se habla de un «mundo nuevo» que está surgiendo) surgen nuevos aspectos de un «mundo viejo» tanto más necesitado de la perenne «novedad» del cristianismo, que hace nuevas todas las cosas. Es verdad que las personas buscan nuevas formas de pensamiento y de acción, muchos están convencidos de una autosuficiencia sin la fe y sin la gracia divina, a nadie escapa que existe cierto trágico divorcio entre la fe y la vida vivida, e incluso entre pensamiento científico y crecimiento en la fe, en la fe en el Dios viviente. Esto no tiene porqué ser así, forma parte de la relación entre el orden natural y el orden sobrenatural. La Iglesia católica, pensándose a sí misma respecto de su misión ante el mundo y la sociedad, se vio como “sacramento universal de salvación”, con plena conciencia de que no se puede dar plenitud humana sin la gracia, sinel Verbo de Dios, que “(…) es el fin de la historia humana, el punto focal de los deseos de la historia y de la civilización, el centro del género humano, la alegría de todo corazón, la plenitud de sus aspiraciones”3.



_________________________________________________
1 BENEDICTO XVI, Enc. Enc. Caritas in veritate, n. 5.
2 Cf CONC. ECUM. VAT. II, Const. dogm.Lumen gentium, 34.
3 CONC. ECUM. VAT. II, Const. past. Gaudium et spes, 45.

jueves, 6 de octubre de 2011

Centenario del templo de Santa Teresa de Jesús de Garín (Escobar, Zárate – Campana) y cincuentenario de erección como parroquia

Artículo extraido de: padrenuestro.net
Cartel fiestas Santa Teresa de Jesús en Zárate - Campana
El día del centenario del templo asistirá el Obispo diocesano, Mons. Oscar Sarlinga
CUMPLE CIEN AÑOS EL TEMPLO DE SANTA TERESA DE JESÚS (iglesia matriz) de Garín, partido de Escobar, y cincuenta años de erigimiento como parroquia.

PROGRAMA FIESTAS 2011

SÁBADO 1 DE OCTUBRE
JUBILEO DE LAS INSTITUCIONES Y GRUPOS DE LA PARROQUIA
GRAN CARAVANA EVANGELIZADORA
Portando la Imagen Peregrina de Santa Teresa de Jesús
10:00 hs. Salida desde el Atrio de la Pquia. recorriendo las calles de nuestra Ciudad
Participan: Todos Agentes de Pastoral de la Parroquia y Capillas.
APERTURA SOLEMNE DEL MES TERESIANO
19:30 hs. Solemne Misa de la Unidad
Entronización de la Reliquia e Imagen de Nuestra Patrona Santa Teresa de Jesús
Durante todo el Mes de Octubre se puede alcanzar Indulgencias Plenarias
HORARIOS DURANTE NOVENARIO
DEL 6 AL 14 DE OCUBRE
09:30 hs. Visita de la Reliquia de Santa Teresa de Jesús a las Instituciones.
12:00 hs. Rezo del Ángelus.
14:30 hs. Visita de la Reliquia de Santa Teresa de Jesús a las Instituciones.
19:00 hs. Rezo del Santo Rosario y Confesiones.
19:30 hs. Santa Misa. Imposición de la Reliquia de Santa Teresa de Jesús.
“Virtudes Teologales y Virtudes Cardinales”
1er. Día - Jueves 6 – Memoria de San Francisco de Asís.
Oramos por la Santa Iglesia Católica y sus Ministros.
Participan: Ministros de la Sagrada Comunión y Grupos de Oración.
Renovación de las Promesas Bautismales. Bendición del Agua.
“Virtud de la Justicia”
2do. Día - Viernes 7 - Memoria de Ntra. Sra. del Rosario
Oramos por la Patria, los Gobernantes y Entidades de Bien Público.
Participan: Autoridades Municipales, Asociaciones, Entidades de Bien Público, Policías; Bomberos, bancarios, Registro Civil y Centros Vecinales.
Bendición de Rosarios. Traer Bandera Argentina para ser bendecida.
20:30 hs. Vigilia de Oración ante Jesús Eucaristía: “Tabor”
”Virtud de la Templanza”
3er. Día - Sábado 8
Oramos por todas las Familias
JUBILEO DE LOS DEPORTISTAS
Participan: Clubes y deportistas de diferentes disciplinas.
10: 00 hs. Vuelta Olímpica con deportistas. Salida desde el Atrio de la Pquia. hasta el Polideportivo Islas Malvinas Anexo II.
10:30 hs. Santa Misa de Campaña. Bendición de los equipos de fútbol.
Apertura Oficial Gran Campeonato de Futbol “Copa Centenario S. Teresa de Jesús”
JUBILEO DE LA FAMILIA
Participan: Matrimonios; En especial los que celebran Bodas de Plata o de Oro.
19: 30 hs. Santa Misa y Celebración del Sacramento del Matrimonio.
Renovación de las Promesas Matrimoniales, Bendición de los esposos y de los hijos.
Bendición de las Llaves del Hogar y de los Vehículos.
Compartir de las familias en el Salón Parroquial. Traer comida a la canasta y refrescos
“Virtud de la Prudencia”
4to. Día Domingo 9 “Día de las Misiones en Argentina”
Oramos por los Niños y los Jóvenes.
Misas de Precepto a las 08:00; 10:30 y 19:30 hs.
Participan: Grupos Misioneros, Evangelizadores, Catequistas, Niños y Jóvenes
09:30 hs. Santo Rosario Misionero alrededor de la Plaza con los Niños Catequesis
10:30 hs. Santa Misa. Oración y Bendición de Niños.
19:30 hs. Santa Misa y Consagración de Jóvenes.
“Virtud de la Fortaleza”
5to. Día - Lunes 10
Oramos por los Fieles Difuntos
17: 00 hs. Solemne Responso por los Fieles Difuntos en el Cementerio de Garín.
19: 30 hs. Santa Misa. Traer lista con nombres de los seres queridos difuntos.
Recordatorio: Obispos Diocesanos, Párroco y Benefactores de la Pquia. Difuntos.
Bendición del Salón Parroquial bajo el nombre de: “Padre Alberto Perna”,
Descubrimiento de Placa en Memoria del 1° Cura Párroco, fallecido el 27/10 /1985
“Virtud de la Fe”
6to. Día - Martes 11
Oramos por los Trabajadores y por los Maestros.
Participan: Trabajadores, Establecimientos Educativos: maestros y estudiantes; Profesionales, empresarios, comerciantes, empleados y amas de casa.
Bendición de manos y herramientas de los trabajadores.
“Virtud de la Esperanza”
7mo. Día - Miércoles 12
Oramos por los Profesionales de la Salud, Los Enfermos y Ancianos.
Participan: Agentes de la Salud, Hospital y Salas de Primeros Auxilios.
19: 30 hs. Santa Misa y Unción e imposición de manos a los Enfermos.
Oración y Bendición de Médicos y Enfermeros. Traer velitas para ser bendecidas.
“Virtud de la Caridad”
8vo. Día - Jueves 13 Día de la Caridad.
Oramos por las Vocaciones Sacerdotales, Religiosas y Laicales.
Participan: Religiosos/as, Laicos Consagrados, miembros de Cáritas y Comedores.
18: 30 hs. Hora Santa y Rezo del Santo Rosario por las Vocaciones.
Traer ropa, alimentos y artículos de limpieza para presentar en el Ofertorio.
“La Práctica de las Virtudes nos lleva a la Santidad”
9no. Día - Viernes 14
Oramos por Nuestra Comunidad.
Participan: Grupos e Instituciones Parroquiales y de las Capillas.
14: 00 a 19: 00 hs. “Cadena de Rosarios” por Ntra. Diócesis y por la Comunidad
20:30 hs. Vigilia de Oración ante Jesús Eucaristía: “Tabor”
Festividad Litúrgica
En Honor a Santa Teresa de Jesús
Sábado 15 de Octubre
08:00 hs. Canto de las Mañanitas y Rosario de la Aurora.
18: 30 hs. Solemne Procesión
con la Imagen y Reliquia de Santa Teresa de Jesús
19: 30 hs. Misa Solemne en el Templo Parroquial
Presidida por su Excia. Rvdma. Mons. Oscar D. Sarlinga
Se pueden Ganar indulgencias Plenarias
Participan: Autoridades, Instituciones, Escuelas y Colegios con sus estandartes y abanderados, Capillas con sus Imágenes Patronales.
Recorrido de la Procesión por las Calles:
Padre Perna, Sarmiento, Larroca, Mitre y Retornando por Padre Perna hacia el Templo Parroquial.
Se ruega ornamentar y embanderar los frentes de las casas.

lunes, 19 de septiembre de 2011

CONGRESO DE OFICIALES DE LA LEGION DE MARIA

Imagen de Ntra. Sra. de Kibeho, sobre la cual se expusiera en el congreso

El 22 de julio, según el cronograma del programa adjunto tuvo lugar en el salón P. Anibal Di Francia junto al templo parroquial de Nuestra Señora del Carmen (Campana) el congreso bianual de los dos consejos diocesanos , abierto a cualquier fiel cristiano, tanto los actos litúrgicos como las deliberaciones, al cual concurrieron un centenar de oficiales de ambos consejos, a los que se agregaron por la tarde delegados del consejo superior, y otros fieles cristianos en los actos litùrgicos y en la ponencia del P. Asesor Diocesano Pbro. Dr. Néstor Daniel Villa, quien dirigiera las oraciones y el rosario de inicio y celebrara la santa misa.
El P. Asesor destacó en ella, un aspecto curioso de una aparición mariana moderna (Ruanda, 1981-1989) donde se menciona de por parte de la Santìsima Virgen a la legión de María, ya operante en la vecina Kenia, aconsejando a la vidente principal su incorporación a las filas de la misma. Asimismo hizo una comparación entre esa aparición (aprobada por la Sagrada Congregación de la Doctrina de la Fe el 29 de junio de 2001) y Guadalupe-(Mexico 1531), Medjugorie (Bosnia1981 y aún abierta) y a la de Fàtima (Portugal- 1917) por las similitudes y contenidos. Destacando también el sentido de las devociones y la necesidad de encuadrarlas en el misterio de la verdadera devoción mariana según la Revelación y el Magisterio de la Iglesia y su alcance.
Señaló el 35mo. Aniversario de la creación de la diócesis y la consagración de la cocatedral de La Natividad del Señor el 27 de agosto, en Belèn de Escobar, templo tan querido por la LEGION DE MARIA a causa de celebrarse en ella las fiestas diocesanas anuales y otros actos solemnes que la misma auspiciara en varias oportunidades.
Cabe destacar la delicada hospitalidad de los PP. Rogacionistas, del pàrroco R.P. Giovanni Guarino RCJ quien asistiera la misa y realizara la Bendiciòn Eucarística de clausura, como la presencia a lo largo de la jornada de los PP. Federico Lavarra RCJ y Ernesto Butano RCJ.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Nueva capilla de “Santa Teresa de Jesús” en el barrio “Río Luján” de Manzanares, partido de Pilar (diócesis de Zárate-Campana)






La nueva iglesia fue dedicada por Mons. Oscar Sarlinga, Obispo diocesano, el día 30 de agosto, en la misa de las 18,  con la concelebración del cura párroco del lugar, Pbro. Lic. Hugo Acuña, y numerosos sacerdotes, entre los cuales el P. Oscar Iglesias, decano de Pilar, el P. Gabriel Micheli, cura párroco de Nuestra Señora de la Paz y San Francisco de Asís y numerosos otros, entre los cuales el P. Marcelo, de la parroquia de Nuestra Señora de Aranzazu, quien concurrió con los coordinadores de la futura misión joven. Asistieron el Sr. Intendente municipal, Dr. Humberto Zuccaro y algunos concejales, junto con muy numerosos fieles laicos, y también algunas religiosas. También se hallaban presentes los jóvenes de la asociación “La posada de la vida” de recuperación de tóxico-dependientes, en la cual intervienen tanto el P. Hugo Acuña como la Sra. Patricia Sikora (quienes son delegados, a la vez, de la pastoral de adicciones en la diócesis).
La zona del Río Luján es vasta y “el bajo” del río, como se lo llama, se extiende por los partidos de Exaltación de la Cruz, Pilar, Campana y Escobar.  Cerca del casco histórico de Manzanares y no lejos del Parque industrial de Pilar existe una zona humilde, no tan conocida, pero poblada por gente amigable y llena de esperanzas, que es el barrio “Río Luján”.  Cercana a una hermosa reserva natural como es el cauce del Río Luján que cruza el distrito, existe uno de los barrios emblemáticos de la comunidad manzanarense, ubicado en una zona semi-rural, rodeado de barrios cerrados y quintas. El río está cerca y a veces provoca anegaciones. Existe una salita de salud, tanto más necesaria por la cantidad de los niños que lo habitan, la mayoría en edad escolar. En terrenos del Obispado funcionó hace tiempo la sala de auxilios y de salud, que luego el Municipio construyó en otro lugar, cercano. En ese predio, la edificación, que permaneció como una pequeña casa, fue sede en enero de este año de 2011, de la “misión joven”, a cargo del Padre Mauricio Aracena y de jóvenes de Pilar, Manzanares y de Belén de Escobar (principalmente del colegio “Santa María”) junto con la virgen consagrada Teresa Ferlaino, a quienes acompañaron el cura párroco, Pbro. Hugo Acuña, y un par de días también Mons. Marcelo Monteagudo, delegado de las misiones, y el mismo Obispo, Mons. Oscar Sarlinga.
En la misión 2011 los jóvenes misioneros de la diócesis de Zárate-Campana visitaron todas las casas y familias, reunieron una importante cantidad de niños y adolescentes y al mismo tiempo contribuyeron al relevamiento de las familias más carenciadas para la ulterior misión de Caritas parroquial de San Luis Gonzaga de Manzanares.
En el próximo verano de 2012 la zona será nuevamente misionada por los jóvenes de la parroquia de Nuestra Señora de Aranzazu, de San Fernando (diócesis de San Isidro) junto con el padre Marcelo, vicario parroquial, y a pedido del Pbro. Jorge Lagazio.
El Obispo Mons. Oscar Sarlinga realizó una sucinta reseña de la historia del lugar, desde los tiempos de la sala de salud, hasta la actual capilla, así como narró aspectos de la misión joven 2011 y de la vida de Santa Teresa de Jesús, la patrona de la nueva iglesia. La iglesia fue dedicada con la bendición de los muros, del sagrario y del altar.

lunes, 29 de agosto de 2011

Mensaje de Mons. Oscar Sarlinga a la asociación de fieles "Santa María de la Estrella"

Se trata de un movimiento principalmente juvenil, aprobado como "asociación privada de fieles" que nació en la diócesis de San Isidro y se extendió en el país, principalmente en Buenos Aires y en la diócesis de Zárate-Campana (en especial en el partido de Pilar).

Queridos amigos de la asociación de fieles de Santa María de la  Estrella:


Hoy es el XIV aniversario del comienzo de este camino de fe, evangelización y alegría en el Señor que significa "Santa María de la Estrella", de la mano de María, a quien llamamos Estrella de la Evangelización.
Fueron años de un camino en el cual nunca les faltó el Amor de Jesús. De allí el entusiasmo que brilló en los corazones de ustedes, y que hizo que muchos hermanos y hermanas se acercaran a la fe, y quisieran a la Iglesia como "Casa y Escuela de comunión", como luz de esperanza, con sus orígenes en la querida diócesis de San Isidro.
También en esta diócesis de Zárate-Campana creció Santa María de la Estrella. Gracias por todo lo que significa para nosotros su presencia.
No puedo estar presente en razón de las celebraciones en Belén de Escobar; vaya para ustedes mi amistad y afecto en el Señor, y bendición pastoral.

+Oscar Sarlinga, Obispo de Zárate-Campana


27 de agosto de 2011

domingo, 7 de agosto de 2011

Carta pastoral de Mons. Oscar Sarlinga en el XXXV aniversario de la diócesis de Zárate-Campana


Carta pastoral de Mons. Oscar Sarlinga en el XXXV Aniversario de nuestra diócesis de Zárate-Campana
Sábado 6 de agosto, en la Transfiguración del Señor

Queridos hermanos y hermanas
Les pido hoy que escuchemos lo que nos dice el Padre a través del Espíritu, como en la Transfiguración, una vez que la nube los cubrió con su sombra, cuando en presencia del Señor transfigurado, en presencia de Moisés y de Elías, los apóstoles oyeron la voz del Padre que dijo “este es mi Hijo muy querido, escúchenlo” (Cf Mt 17,5). En nuestro caminar en la fe, queremos escuchar lo que el Espíritu dice a la Iglesia, también a nuestra Iglesia particular, nuestra Iglesia diocesana. Les pido también, paciencia y misericordia, aplicadas a la lectura de ésta.
En este XXXV aniversario se hace más y más necesario el fortalecer la comunión orgánica en nuestra Iglesia particular a fines de recibir un impulso nuevo, capaz de crear tiempos nuevos de evangelización, en una Iglesia que quiere arraigarse todavía más en la fuerza profética y poder perennes de Pentecostés, procurando ser cada día más como «un solo corazón y una sola alma» (Hech. 4, 32), pues tenemos por delante la apasionante tarea de hacer renacer el celo evangelizador, en el horizonte exigente y comprometido de la pastoral ordinaria. De esta misión religiosa “brotan tareas, luz y fuerzas que pueden contribuir a construir y consolidar la comunidad de los hombres según la Ley divina”(1)

I. La Iglesia-comunión en la actual diócesis de Zárate-Campana, que comenzó en el siglo XVII
Nuestra diócesis de Zárate-Campana cumple en este 2011 sus XXXV años desde su creación, el 21 de Abril de 1976, por parte de Su Santidad Pablo VI, con territorio desmembrado de la entonces diócesis de San Isidro y de la diócesis de San Nicolás. Como diócesis, como circunscripción eclesiástica, es “joven”, en cambio, presencia y como corriente de evangelización y misión, e incluso de organización civil, data de siglos; una de sus parroquias, Santiago del Baradero, es la más antigua de la provincia de Buenos Aires (de 1615, “curato de indios”, en el lenguaje de la época, curato del pueblo originario que allí poblaba, y donde se hablaba guaraní, lengua defendida y sistematizada por Fray Luis Bolaños, cura de Baradero) y otra de ellas, San Antonio de Areco (de 1730, es de las primeras erigidas como curato en la actual provincia civil, y no menor lo es Nuestra Señora del Pilar, en el actual Pilar, y Exaltación de la Cruz).
Nuestra Patrona, otorgada por el mismo Papa Pablo VI, es la Virgen de Luján, de la cual éstas son sus tierras. Es la misma Virgen María, en la advocación en la cual es Patrona de la Argentina, la Virgen Madre de la Iglesia, porque “Madre de Cristo y de todos los miembros de Él”(2) , como enseñó San Agustín, y Madre de todos nosotros, de los cuales el Señor Jesús se dignó ser “padre y hermano”(3) . La Virgen de Luján nos ha sanado, nos ha hermanado desde el inicio de nuestra diócesis, y de ello es testigo la extraordinaria e ininterrumpida peregrinación del Pueblo de Dios a su Santuario en Luján, que corre como un río de vida fluyente y sanante a lo largo de nuestra diócesis, en el mes de noviembre, y esto desde su creación hasta ahora.
Con la erección de la diócesis, el 21 de abril, al mismo tiempo nombró el primer Obispo, Mons. Alfredo Mario Espósito Castro, quien fuera consagrado poco después, el 4 de julio de 1976; Pastor dedicado, querido por su pueblo. Como épocas, como tiempos, fueron difíciles para nuestro país, se produjo mucho dolor y desolación; desconcierto, desgarro. La esperanza, “el realismo de la esperanza” (regado por el sufrimiento de muchos) abrió también sendas que permitieron caminar, avanzar, en medio de las pruebas.
Hoy, en 2011, un aniversario, cualquier “aniversario” no deja de ser una fecha convencional (tanto más un aniversario “35” que no simboliza ni “bodas de plata” ni “bodas de oro”), pero no por ello menos significativa, y tanto más significativa será si la miramos a través del Rostro de Jesús, de su mirada de Amor. Esta mirada, que es de fe, nos ayudará a ver con ojos de justicia (“que mira desde el Cielo; cf Ps. 85) y de misericordia (la que triunfa sobre el juicio).
En las palabras inaugurales el día de la toma de posesión de la diócesis, el 18 de febrero de 2006, quien habla expresó que “(…) todo plan de vida cristiana y también todo proyecto pastoral y evangelizador han de partir de la contemplación del Rostro de Jesús y de la conversión del corazón, para así obrar una misión evangelizadora que llegue a todos sin excepción, preferencialmente a la ‘oveja perdida’ de la que habla el Evangelio”, y me refería entonces, “a una acción evangelizadora que trasunte amor por la Verdad, inmenso afecto por todos los seres humanos, con apertura, respeto y convicción espiritual”.(4) Si me permiten un sinceramiento personal, siempre he creído muy profundamente en el misterio de la Iglesia como comunión, en sus imágenes y notas esenciales que la definen, y que revelan que en su dimensión más íntima, ella, la Iglesia, es ese “misterio de comunión”, sobre todo con la Trinidad(5). Y esa comunión, que es “jerárquica” lo es en sentido teológico y no sociológico, porque, como enseña el Concilio Vaticano II, “los fieles, unidos al Obispo, tienen acceso a Dios Padre por medio del Hijo, Verbo encarnado, muerto y glorificado, en la efusión del Espíritu Santo, y entran en comunión con la Santísima Trinidad”(6). La comunión, en efecto, expresa también la realidad de la Iglesia particular.
En el recuerdo este año de la creación de la diócesis y de la ordenación del primer Obispo, hacemos también un acto de fe en la Palabra de Dios, que nos afirma en el libro del Apocalipsis que los muros de la nueva Jerusalén “se asientan sobre doce piedras, que llevan los nombres de los doce Apóstoles del Cordero” (Ap 21, 14), y en la enseñanza de la Iglesia, que en la Constitución Dogmática Lumen Gentium manifiesta que “los Obispos han sucedido, por institución divina, a los Apóstoles como Pastores de la Iglesia, de modo que quien los escucha, escucha a Cristo, y quien los desprecia, desprecia a Cristo y a quien le envió”(7).

II. La iglesia catedral; Liturgia y caridad: La iglesia concatedral de la Natividad del Señor y su consagración el 27 de agosto
La caridad de la Iglesia es manifestación del amor trinitario(8), es como su alma (pues su Alma, es el mismo Espíritu Santo) razón por la cual las características que el Señor Jesús quiso para su Iglesia han sido que fuera “pueblo reunido en virtud de la unidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”(9). Los invito, a la luz del misterio de Cristo, Pastor y Obispo de las almas (cf. 1 P 2, 25), a la luz de su Transfiguración, a que nos pongamos a disposición en nuestra vida concreta a realizar ese Amor trinitario y misional. No dejemos la misión, los “gestos de misión”, el “estado permanente de misión” y “la dimensión misionera de toda la pastoral” (¡No olvidemos el tríptico de Aparecida, que llevamos a todas las misiones de los jóvenes!). A esto nos han llamado los Obispos de América Latina y el Caribe, guiados por el Papa Benedicto XVI, en la “Misión continental”.
La Misión continental tuvo inicio en nuestra diócesis el 9 de mayo de 2009, día en que hemos celebrado las fiestas patronales diocesanas (sábado posterior a la festividad de la Virgen de Luján) y, como acontecimiento profundamente marcante, la consagración de la diócesis al Sagrado Corazón de Jesús, irradiante de Amor y de Misión.
Nos encontramos muy contentos de la asunción convencida y profunda del espíritu de la misión en los corazones de los sacerdotes, diáconos permanentes, religiosos, religiosas, seminaristas, y laicado. De todo ello, en la Liturgia y en la caridad (también en su dimensión social, o solidaridad) es centro la iglesia catedral; más que una declaración “jurídica” (que también lo es), el declarar “catedral” a una iglesia, significa ser “centro irradiador” de lo anterior.
En ese contexto, este año 2011 la celebración conmemorativa del XXXV aniversario tendrá lugar con motivo de la consagración de la iglesia concatedral de la Natividad del Señor (declarada tal en 2008) y el término de las obras de restauración de dicho templo. Por esta razón, el sábado 27 de agosto, a las 18, presidirá la celebración eucarística el Sr. Nuncio Apostólico, Mons. Adriano Bernardini. Su presencia como representante del Santo Padre Benedicto XVI nos reafirma en la nota de la apostolicidad de la Iglesia y nos moviliza a querer que el Evangelio se conserve siempre íntegro, para lo cual los Apóstoles dejaron como sucesores a los Obispos, confiándoles su propia tarea de enseñar(10), y de santificar y guiar al Pueblo de Dios cum Petro et sub Petro, continuando la labor desarrollada por sus predecesores, con dinamismo misionero(11).
Será la ocasión de dar gracias, gracias porque el Corazón de Jesús recibió nuestra consagración (12), acción de gracias por el camino recorrido desde la creación de la diócesis, lo cual, como toda dimensión humana, posee luces y sombras, pero en la cual la obra poderosa del brazo del Señor se ha manifestado, en la comunión eclesial, en el estado permanente de misión, en los gestos misionales (en especial de parte de la juventud misionera) y en la dimensión misional de toda la pastoral, en la Liturgia, en la catequesis (de la cual los encuentros y congresos catequísticos han sido signo), en la Caritas y la atención a los más necesitados, en Justicia y Paz, en la educación católica, en las vocaciones diversas y complementarias a la vida cristiana, sin dejar de mencionar, con inmensa alegría, el aumento y perseverancia de las vocaciones sacerdotales, que ha llevado a la reapertura del Seminario “San Pedro y San Pablo”.
Por supuesto que siempre hace falta “más” (en el decir de San Ignacio de Loyola), “más”, pero siempre dando gracias al Padre y Señor, por todos los beneficios concedidos, agradeciéndole, con la humildad de saber que nosotros, “todos”, somos simples instrumentos (“Protagonista” como tal, lo es el Espíritu Santo), y es Él, el Padre, quien “en Cristo” da origen, crecimiento, si somos fieles a su don de Amor. Creo que en este sentido de humildad (la cual, para manifestarse auténtica, tiene que ser probada en sufrimiento, en la Cruz madurado) y de acción de gracias, está la base del verdadero sentido de la “comunión orgánica”. Me parece ver en ello la dulce advertencia que nos hiciera el Beato Juan Pablo II cuando estábamos ingresando en el tercer Milenio: “No nos hagamos ilusiones: sin este camino espiritual, de poco servirían los instrumentos externos de la comunión. Se convertirían en medios sin alma, máscaras de comunión más que sus modos de expresión y crecimiento(13).

III. Peregrinar del Pueblo de Dios en nuestra diócesis; no nos cansemos de peregrinar a la Casa del Padre
No quisiera abundar en datos; una carta del Obispo no es un tratado de historia ni de teología pastoral. Recordemos, hagamos “memoria” (como el Pueblo de Israel) de los acontecimientos fundantes. Nuestro primer Obispo diocesano, el llorado Mons. Alfredo Mario Espósito Castro, claretiano, desarrolló su misión como sucesor de los Apóstoles, en razón de la consagración episcopal y mediante la comunión jerárquica, signado en particular por el sufrimiento y la enfermedad; así, unido a la Cruz, fue “principio visible y el garante de la unidad de su Iglesia particular”(14). La fecha de su consagración episcopal (4 de julio) generó la costumbre que durante años se celebrara “el aniversario de la diócesis” más que el día de su creación por parte del Pontífice (el 21 de abril), en el día de la consagración del primer Obispo y su toma de posesión (por parte del entonces Nuncio Apostólico, Mons. Pío Laghi). Me parece bien, salvo mejor y autorizada opinión, continuar con esta costumbre del 4 de julio; sólo este año nos hemos tomado la licencia de hacerlo en agosto, por la consagración e inauguración de la segunda catedral de la diócesis.
Mons. Alfredo Esposito Castro fue fundador del Seminario “San Pedro y San Pablo”, y dimitió en 1991 a la cura pastoral de la diócesis por razones serias de salud; luego de diversos destinos, fue acogido en la clínica San Camilo, donde fue cuidado y atendido amorosamente y allí falleció el 1ro. de enero de 2010, habiendo sido celebrada la misa de cuerpo presente en la iglesia catedral de Santa Florentina el día 2, y allí, en la renovada iglesia criptal de Santa Florentina y sus hermanos Obispos Padres de la Iglesia Hispana, en el área tumbal que se creara a tales efectos, espera la resurrección de los muertos, junto al altar del Sagrado Corazón de Jesús. Su báculo, la mitra de su consagración y una fotografía se hallan en un cofre vidriado sobre su tumba, como perpetuo recuerdo para la piedad de los fieles.
Nuestro segundo Obispo fue Mons. Rafael Eleuterio Rey, quien siendo obispo auxiliar de Mendoza, fue trasladado por el Papa Juan Pablo II a la diócesis el 18 de abril de 1992, donde estuvo a cargo durante catorce años. En febrero de 2006 presento su renuncia a la diócesis por razones de salud. Al Padre de las luces, al Señor de la historia, le agradecemos también por los dones con que lo colmó en su episcopado, y por todo el bien que pudo transmitir al Pueblo de Dios que le fuera confiado.
En cuanto a quien habla, va de suyo que sería inconveniente e imprudente referirme a mi persona. Me permito sólo esto: agradezco al Señor algunos símbolos, como el día de mi nombramiento por parte del Papa Benedicto XVI (curiosamente, el 3 de febrero, el día de San Oscar, Obispo, mi patrono; a quien le pedí protección y ayuda), el acompañamiento de tantos Obispos (27) en la celebración y del Señor Nuncio, así como de tanto clero y sobre todo de tantos, tantos fieles laicos, el día de mi toma de posesión, en la memorablemente calurosa tarde del sábado 18 de febrero, en el curso de la ceremonia que tuvo lugar en la catedral Santa Florentina, tan desbordada que las gentes estuvieron paradas al rayo del sol en el atrio, en la calle y en la plaza (al cabo de estos años: ¡gracias por esa paciencia y ese espíritu de fe!). Recordaré sólo que quise mirar hacia adelante (“veamos esperanza”, les dije) porque las miradas sombrías siempre me parecieron no provenientes del Espíritu, y que pedí ser reafirmado, como nuevo Pastor, en “la continua ‘novedad’ del cristianismo”, que radica en ser “acontecimiento de la salvación, que renueva interiormente en Cristo a la humanidad, transformando al ser humano desde su ‘ser interior’ más profundo: el ‘corazón’, entendido éste en sentido bíblico”, para lo cual intenté precisar que “para ver esa salvación actuante, para ver al Cristo viviente, es preciso el don de la fe, los ‘ojos de la fe’”.
El Señor hace nuevas todas las cosas. Él es el Señor de la historia. Él, y sólo Él, conduce el peregrinar del Pueblo de Dios en esta iglesia particular de Zárate-Campana, y en la Iglesia católica en el Universo. Levantemos el corazón a Él, al Señor de la historia, y veremos las maravillas que Él hace por nosotros.

IV. “Casa y escuela de comunión”: que lo sea de verdad
Nos hemos acostumbrado, quizá demasiado, a los acertados diagnósticos y a las palabras dignas y hermosas. No dejan de ser verdad, todo lo contrario, sólo que han de manifestarse en “vida” y vida en abundancia, pues la comunión eclesial es comunión de vida, de caridad y de verdad(15) y, en cuanto lazo del hombre con Dios, funda “una nueva relación” entre los hombres mismos y manifiesta la naturaleza sacramental de la Iglesia; sin esa “perenne novedad” del Espíritu la Iglesia podría verse menoscabada en su manifestación como “la casa y la escuela de la comunión” que es, como la definiera Juan Pablo III.(16). El ser humano es proyectual. Nuestro proyecto ha de fundarse en la Eucaristía, sacramento de la comunión eclesial, donde “participando realmente del cuerpo del Señor, somos elevados a la comunión con Él(17) y entre nosotros” . Al mismo tiempo, la Eucaristía es la epifanía de la Iglesia, donde se manifiesta su carácter trinitario.
¿Queremos ahora afianzarnos en un proyecto, en un camino?. Que ese proyecto esté inspirado por el Espíritu y siga las huellas de Cristo. Nuestro Plan Pastoral diocesano hace referencia a un “caminar juntos en Cristo” y parte de la consideración de la (por entonces) celebración del trigésimo aniversario de la diócesis, con oportunidad de la fiesta patronal del 8 de mayo de 2006: “(…) hemos iniciado un renovado caminar juntos, en pos de la nueva evangelización, nueva en su ardor, nueva en sus métodos y modos de expresión, como lo dijera el Papa Juan Pablo II. Después del Gran Jubileo por el que entramos en el IIIer. Milenio, como Iglesia particular queremos afianzar su herencia, puesto nuestro corazón en Jesucristo, el que hace nuevas todas las cosas (…). En ese «sentir con la Iglesia» es comprendido este Plan Pastoral (…) Ahora nos toca recoger la herencia jubilar, tomar conciencia de que lo importante no es tanto hacer “programas nuevos”, sino vivir la novedad permanente del evangelio. Creo que es todo un programa; lo que no quita que lo concretemos, en la medida de las necesidades pastorales, más y más. A nosotros la tarea de hacerlo carne. Todo esto queremos hacerlo en fidelidad a la Iglesia, en comunión orgánica dentro de ella, con el Papa, Obispo de Roma y sucesor de San Pedro, el cual “(…) es el principio y fundamento perpetuo y visible de unidad, tanto de los Obispos como de la muchedumbre de los fieles”(18).

V. Conclusión: el Rostro de Cristo, su mirada profunda que cala en nuestro interior
Discúlpenme la insistencia, mi deseo no es cansarlos con “ideas de fuerza” de ningún tipo. Persevero en el pedido: contemplemos el Rostro del Señor, sobre todo su mirada, su dulzura, en el Rostro de esa Cabeza coronada de espinas. ¿Por qué contemplarla? (Recordarán, nos lo preguntábamos en el mismo Plan pastoral). Porque la santidad es la perspectiva en la que debe situarse todo camino pastoral; la santidad de nuestras comunidades es lo que ha de sostener, recrear y potenciar las actividades propias de la pastoral ordinaria. Es en el seno de la comunidad eclesial (y en la Iglesia particular se dan todas las notas de la Iglesia universal), donde el ser humano recorre su camino de conversión, de liberación del pecado y de crecimiento en la fe, hasta el encuentro con Jesucristo. Por este motivo, si queremos contribuir en nuestra diócesis a una profunda renovación humana y cristiana, es preciso asumir que no hay “humanidad nueva” si no hay en primer lugar creaturas nuevas, hechas de nuevo (“déjame nacer de nuevo, Señor”, cantamos) con la novedad del bautismo y de la vida según el Evangelio.
Y esto dicho, a comenzar desde el Obispo, que es en su diócesis Vicario(19), aunque indignamente de su parte, del “gran Pastor de las ovejas” (Hb 13, 20), y que, pidiendo por su propia conversión al Señor cada día, ha de manifestar la paternidad de Dios; la bondad, la solicitud, la misericordia, la dulzura y la autoridad moral de Cristo (…) en su índole trinitaria(20), todos tenemos que poner alma, mente, corazón, sangre y brazos para dar la vida, cada uno según su vocación y elección, para hacer de todos los seres humanos una sola familia, reconciliada en el amor del Padre; así recibiremos como don en la diócesis (y contribuiremos a la Iglesia universal) la perenne vitalidad del Espíritu Santo, que anima la Iglesia y la sostiene en la humana debilidad, debilidad que deviene fortaleza cuando hunde sus raíces en la misma vida de Cristo, que es toda trinitaria(21) .
Convencidos de la fuente de la Gracia, invoquemos la ayuda del Cielo, invoquemos sobre nosotros la Paz, que es un bien tan grande que entre las cosas terrenas nada se desea con mayor ardor, nada se puede tener de más perfecto(22) e imploremos esa Gracia de aquél que es el «Príncipe de la paz» (Is 9,6).
No dejemos de recurrir a la intercesión de María Santísima, aun cuando humanamente se derrumbara toda esperanza (humana); la esperanza teologal abre horizontes infinitos; María “es causa de salvación para todo el género humano”(23), Ella es nuestra Señora, quien desde Luján nos dice: “ora, canta, camina, trabaja, ten esperanza, que mi luz sea tu luz”. La luz de María es la Luz del Rostro de Cristo, Resucitado de entre los muertos. Él hace nuevas todas las cosas.



Con mi afecto y bendición,
+Oscar, obispo de Zárate-Campana
6 de agosto de 2011
_________________________________
Notas:
1. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución pastoral Gaudium et Spes, n. 42.

2. San Agustín, De saпct. Virg., 6: PL 40, 399.
3. Cf San Anselmo, Or., 47: PL 158, 945.
4 Véase el link en AICA: http://www.aica.org/index.php?module=displaystory&story_id=1094&edition_id=49&format=html)
5. Cf Congregación para los Obispos, Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos, “Apostolorum Successores”, aprobado por el Sumo Pontífice Juan Pablo II durante la audiencia concedida al suscrito Cardenal Prefecto el 24 de enero de 2004 y ordenada su publicación. Roma, desde la sede de la Congregación para los Obispos, el 22 de febrero de 2004, fiesta de la cátedra de San Pedro, n. 7. La Iglesia comunión y misión.
6. Conc. Ecum. Vat. II, Decreto Unitatis Redintegratio, 15.
7. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Lumen Gentium, 20; cf. Catecismo de la Iglesia Católica, 860-862. Cf también las dos citas escriturísticas que el Directorio de los Obispos hace al respecto: “Yo soy el buen Pastor; y conozco mis ovejas y las mías me conocen a mí” (Jn 10, 14). “La muralla de la ciudad se asienta sobre doce piedras, que llevan los nombres de los doce Apóstoles del Cordero” (Ap 21, 14) (Congregación para los Obispos, Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos, “Apostolorum Successores”, aprobado por el Sumo Pontífice Juan Pablo II durante la audiencia concedida al suscrito Cardenal Prefecto el 24 de enero de 2004 y ordenada su publicación. Roma, desde la sede de la Congregación para los Obispos, el 22 de febrero de 2004, fiesta de la cátedra de San Pedro, Capítulo I).
8. Cf Benedicto XVI, Enc. Deus Caritas est, n. 19.
9. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Lumen Gentium, n. 4.
10. Cf. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Dei Verbum, n. 7; Catecismo de la Iglesia Católica, 77-79.
11. Congregación para los Obispos, Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos, “Apostolorum Successores”, aprobado por el Sumo Pontífice Juan Pablo II durante la audiencia concedida al suscrito Cardenal Prefecto el 24 de enero de 2004 y ordenada su publicación. Roma, desde la sede de la Congregación para los Obispos, el 22 de febrero de 2004, fiesta de la cátedra de San Pedro, Introducción.
12. Véase en: http://www.aica.org/
13. Cf Juan Pablo II, Carta apostólica Novo Millenio ineunte, n. 43.
14. Cf. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Lumen Gentium, n. 23.
15. Cf. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Lumen Gentium, n. 9.
16. Juan Pablo II, Exhortación Apostólica Novo Millennio Ineunte, n. 43.
17. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución Sacrosanctum Concilium, n. 47; cf. Constitución dogmática Lumen Gentium, nn. 3; 7; 11; Decreto Unitatis Redintegratio, 2; Juan Pablo II, Carta Encíclica Ecclesia de Eucharistia.
18. Conc. Ecum. Vat. II, Const. past. Lumen Gentium, n. 23
19. Cf. Conc. Ecum. Vat. II, Constitución dogmática Lumen Gentium, n. 27.
20. Cf Congregación para los Obispos, Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos, “Apostolorum Successores”, aprobado por el Sumo Pontífice Juan Pablo II durante la audiencia concedida al suscrito Cardenal Prefecto el 24 de enero de 2004 y ordenada su publicación. Roma, desde la sede de la Congregación para los Obispos, el 22 de febrero de 2004, fiesta de la cátedra de San Pedro, I. El Obispo en el Misterio de Cristo, 1. Identidad y misión del Obispo.
21. Él es el Hijo eterno y unigénito del Padre, desde siempre en su seno (cf. Jn 1, 18), y el ungido con Espíritu Santo, enviado al mundo (cf. Mt 11, 27; Jn 15, 26; 16, 13-14).
22. Cf San Agustín, De Civ. Dei, 19, 11: PL 41, 637.
23. San Ireneo de Lyon, Adv. Haer., 3, 22: PG 7, 959.

jueves, 28 de julio de 2011

ECOS DE LA MISIÓN JOVEN EN VILLA LÍA, SAN ANTONIO DE ARECO

MISIÓN VILLA LÍA
CATEDRAL SANTA FLORENTINA
JULIO 2011
 
 
 
 
 
Desde el jueves 21 hasta el domingo 24 de julio alrededor de cincuenta jóvenes de la Catedral Santa Florentina realizaron una Misión evengelizadora en Villa Lía, San Antonio de Areco, en continuidad a lo que se viene haciendo desde hace un par de años, con el lema “ Ámense como Yo los he amado”. Fue una gran alegría que, al llegar al pueblo, hubiera ya un grupo de niños, jóvenes y familias esperando a los misioneros con alegría y entusiasmo para compartir esos días de gracia especial.
Luego de ubicarse en la Escuela Nº13 donde se dormía, se realizó un breve día de retiro espiritual a cargo del p. Agustín Villa para llenarse más de Jesucristo para contagiarlo a los demás. El mismo se centró en el mensaje del Santo Padre Benedicto XVI para la Jornada Mundial de la Juventud, reflexionando sobre la cita de San Pablo: “Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe.” (cfr. Col 2,7). Preparándose así para vivir este acontecimiento de la Iglesia universal, importante para todos, sea para los que podrán estar presentes en Madrid como para los que se unirán espiritualmente. En el mensaje, el Papa decía: “Cristo no es un bien sólo para nosotros mismos, sino que es el bien más precioso que tenemos que compartir con los demás. En la era de la globalización, sean testigos de la esperanza cristiana en el mundo entero.”, impulsándonos así para la misión.
El día viernes y sábado por la mañana se visitaron las casas del pueblo como así también de la zona rural, gracias a la generosidad de los miembros de la comunidad que llevaban a los misioneros hasta los hogares en los campos más lejanos.
Por la tarde, tuvieron lugar actividades con los niños y los jóvenes. Vale decir que el los misioneros estaban divididos en distintos sub-grupos: servicio, que se encargaba permanentemente de las cuestiones organizativas, de la comida y limpieza, calefacción y demás con un trabajo silencioso y contínuo; niños, jóvenes, contenido y liturgia.
El grupo de niños realizaba juegos, obras de teatro, canciones, enseñaba a los nenes a rezar y las partes fundamentales de nuestra fe. Mientras que el grupo de jóvenes salía a su encuentro para generar diálogo con ellos, pasar momentos de entretenimiento y diversión a través de deportes, charlas amenas con la propuesta de acercarse siempre más a Dios.
Con mucha satisfacción se pudo ver como persevera y sigue creciendo el grupo de Infancia y Adolescencia misionera “Mensajeros de María” de Villa Lía, que se formó en razón las misiones allí realizadas, con el trabajo y la constancia de sus coordinadores y el acompañamiento del cura párroco, el p. Santiago W. Estuvieron presentes en todo momento, felices de poder compartir una nueva misión juntos y enriquecernos mutuamente en la fe.
El sábado visitaron y se sumaron a la misión jóvenes del Grupo juvenil de la Parroquia San Antonio de Padua de Areco.
Todos los días había Adoración al Santísimo, principalmente antes de salir a misionar; se rezaba alguna parte de las Liturgia de las Horas, el Rosario por las calles, se daba gracias a Dios al comenzar el día (de modo que el primer destino una vez salidos de la escuela era la Capilla) y al finalizarlo. Hubo también charlas de formación.
El sábado estuvo presente nuestro Obispo, Mons. Oscar Sarlinga, quien junto al p. Santiago Whelan, Mons. Marcelo Monteagudo (Delegado para las misiones), el p. Hugo Lovatto y el p. Agustín Villa celebró la Santa Misa. Luego tuvo lugar una merienda en donde se compartió algunos videos de las distintas actividades realizadas por el grupo de la IAM “Mensajeros de María” y tocaron la guitarra los “hermanos Rosalez”, Santiago y Franco. Varios jóvenes de la diócesis que estarán presentes en Madrid para la Jornada Mundial de la Juventud estuvieron presentes.
La misión termino el día domingo con la Santa Misa presidida por Padre Agustín Villa en Campana,  junto con el recibimiento de toda la comunidad.
Agradecemos a todos los que colaboraron en esta misión desde lo espiritual y materialmente.